Cuando un profesional es promovido al puesto de analista desarrollador o analista programador es gracias a sus habilidades comunicacionales y de raciocinio. Esto, remite la capacidad de expresar tus puntos de vista, defendiendo y exponiendo con el fin de dar solución a los requerimientos solicitados. Sin embargo, esas habilidades y también las técnicas deben reforzarse para lograr consolidarse como analista desarrollador.

¿Cómo lograr consolidarse como Analista Programador?

Es fundamental reforzar tres habilidades, que resultan esenciales para este nuevo desafío: la comunicación, el análisis y el trabajo en equipo. 

En primer lugar, el profesional es promovido porque ya maneja habilidades comunicacionales. No obstante, debe continuar mejorando para enfrentar los nuevos desafíos. Entre ellos, tener la capacidad de traducir el lenguaje técnico a uno que pueda ser comprendido por cualquier persona. 

Un buen manejo de las habilidades comunicaciones contribuirá a realizar un mejor análisis de requerimientos, problemas o historias usuarias en etapas tempranas de los proyectos. Las habilidades blandas son fundamentales al momento de realizar intervenciones asertivas, siempre con el apoyo del responsable del proyecto. 

De la misma manera, debe incrementarse la capacidad de análisis. El analista desarrollador entiende la necesidad del cliente o usuario al interiorizarse en el proyecto. Del mismo modo, así comprenderá las expectativas tanto de ellos, como del responsable de la jefatura. 

Por último, el analista desarrollador tiene la misión de guiar al equipo técnico. Asimismo, tiene el cometido de transferir el conocimiento y apoyar en la resolución de conflictos internos. En este sentido, es esencial considerar la cantidad y diversidad de personas que componen el equipo de trabajo.

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